Como conciliar el sueño de forma natural
La una, las dos, las tres… Mirar el reloj y preguntarse “no puedo dormir, ¿qué hago para que me de sueño?” cada hora de la noche es angustiante y muy poco beneficioso para el organismo. Parece que no dormir únicamente se asocia al cansancio físico, pero la realidad es que la falta de sueño afecta a nuestra mente y a la manera en la que afrontamos el día.
Una persona que padece problemas para dormir tiene sensación de fatiga, irritabilidad, hará malas digestiones, tendrá dificultad para concentrarse e incluso perderá la libido. Dormir por la noche supone descansar el cuerpo y la mente y desintoxicar el organismo y, además, nos aleja de enfermedades como la hipertensión o el infarto cerebral. Dormir todo lo cura, porque también favorece la cicatrización de heridas y estimula la hormona del crecimiento.
Existen diversas causas que pueden afectar a nuestra capacidad de conciliar el sueño. Aunque algunas están relacionadas con enfermedades o condiciones psicológicas, también hay factores externos que influyen negativamente en nuestras horas de descanso. Estos incluyen un ambiente inadecuado en la habitación, como falta de ventilación, presencia de ruidos o iluminación, y la presencia de dispositivos electrónicos que interfieren con la relajación.
¿Por qué no logramos conciliar el sueño fácilmente?
Conciliar el sueño puede ser un reto cuando nuestro cuerpo o mente enfrentan factores que interfieren con la relajación necesaria para descansar. Las causas pueden ser diversas y suelen abarcar tanto aspectos físicos como emocionales. Las preocupaciones diarias, el estrés y la ansiedad son algunos de los factores psicológicos más comunes que activan nuestra mente y dificultan el proceso de relajación, impidiéndonos desconectar al final del día.
Desde el punto de vista físico, ciertas condiciones médicas también pueden influir en la calidad del sueño. A esto se suma que el entorno de descanso juega un papel fundamental. Dormitorios ruidosos, con exceso de luz, o incluso con temperaturas poco adecuadas, generan incomodidad y dificultan el sueño profundo. Además, el uso de dispositivos electrónicos antes de dormir, como teléfonos, tablets o televisores, puede estimular el cerebro y retrasar la producción de melatonina, la hormona encargada de regular el sueño.
En conjunto, estos elementos pueden hacer que conciliar el sueño se convierta en una tarea difícil, afectando nuestro bienestar y nuestra capacidad de descanso.
Remedios naturales para dormir
Si ya no sabes de qué manera convocar a Morfeo te contamos cómo conciliar el sueño de manera natural. ¡Toma nota!
- Mantén una alimentación sana y equilibrada. Evita hacer cenas copiosas e ingerir alimentos altos en grasas y acidificantes. Es mejor tomar fruta, verduras o caldos calientes. Evita también las bebidas con cafeína, el tabaco y el alcohol.
- Realiza ejercicio físico durante el día. Hacer deporte te hará estar en forma y sentirte con mucha más vitalidad pero, encima, cuando llegue la hora de ir a la cama caerás redondo. Hacer ejercicio te obliga a liberar endorfina y dopamina, reduciendo el estrés y relajando el cuerpo. Eso sí, no lo practiques justo antes de acostarte, porque tu cuerpo y tu mente estarán demasiado activos.
- Ponte horarios. Si decides irte a las cama a las 11 de la noche, tú cuerpo se adaptará a tu rutina y descansarás mucho mejor. Además, es recomendable que siempre realices las mismas actividades antes de dormir: ducharte, echarte crema, leer...
- No uses la cama como tu mesa de trabajo. La cama es para dormir, no es un lugar donde ponerte a trabajar con el ordenador. Si realizas actividades diferentes a la de descansar en la cama, tu cerebro asociará este espacio como un lugar en el que estar despierto y te será mucho más difícil conciliar el sueño cuando quieras hacerlo.
- Saca de la habitación la televisión. Sabemos que es un placer ver la tele desde la cama, pero esto es contraproducente para tu ritmo circadiano del sueño porque las ondas y la luz estimulan tu cerebro y provoca que tu cuerpo se active.
- Si no puedes dormir, no te quedes en la cama. A diferencia de lo que se suele pensar, seguir en la cama tras haber dado 100 vueltas, no hará que te acabes durmiendo, y si lo haces el sueño no será reparador. Por eso, es mejor que te levantes y hagas ejercicios de relajación hasta que te entre el sueño.
- Mantén tu habitación en condiciones. Tener un colchón que se adapte a tus necesidades, eliminar todo rastro de luz y de ruido, mantener una temperatura adecuada y una decoración sencilla y poco estridente serán clave para que te sientas relajado y te duermas.
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Gominolas para ayudar a conciliar el sueño y favorecer un sueño de calidad.
Productos de origen natural para dormir
Además de buenos hábitos, existen productos de origen natural para dormir que pueden ayudar a mejorar la calidad del sueño de manera natural.
- Té para dormir profundamente. La valeriana, la tila, la manzanilla y la amapola de California son remedios naturales procedentes de plantas y tienen propiedades sedantes y calmantes que te ayudarán a la conciliación del sueño de una manera profunda y de calidad.
- Aquilea Sueño Forte: este producto te ayudará a conciliar el sueño más fácilmente, mantenerlo y hacer que sea más reparador.
- Aquilea Sueño Gummies: te ayudará a conciliar el sueño porque contiene melatonina, y además favorece a un sueño de mayor calidad gracias a la Amapola de California. También contiene Melisa y Pasiflora..
- Aceites esenciales: la lavanda es conocida por sus efectos relajantes. Usarla en difusores o almohadas crea un ambiente propicio para el descanso, contribuyendo a un sueño profundo y reparador.