¿De dónde procede la palabra catarro?
“Inflamación aguda o crónica de las membranas mucosas, con aumento de la secreción habitual del moco”. O lo que es lo mismo, un catarro, constipado, resfriado o enfriamiento. Sea como fuere, todos lo hemos padecido y sabemos que acatarrarse es una sensación muy desagradable, pero, ¿de dónde viene la palabra catarro?
La Real Academia Española (RAE) señala su procedencia del latín tardío catarrhus, y este del griego katàrroos, derivado de katarrein, que significa ‘afluir’. El prefijo griego kata significa ‘hacia abajo’, y rrhein hace referencia a la acción de fluir. En este sentido, catarro significaría ‘fluir hacia abajo’.
Aunque no se trata de una enfermedad grave, condiciona de lleno nuestro día a día y solo nos apetece estar en la cama con el pijama y la botella de agua al lado. Entre los síntomas se encuentran la congestión nasal, fiebre igual o superior a los 37.7ºC, escalofríos, dolor de cabeza, tos, dolor de garganta y fatiga. Es una dolencia tan común que existen múltiples fármacos y antídotos caseros que, lejos de curarnos del todo, nos alivian muchos síntomas. A continuación te contamos algunos de los remedios para el catarro. ¡Serás (casi) inmune!
Remedios caseros para el catarro
- Humedece el aire. Para ello, hierve hojas de eucalipto junto con un litro de agua y aspira el vaho. Sentirás los bronquios mucho más destapados. También puedes comprarte un humidificador de vapor frío, pero no te olvides de cambiar el agua a diario.
- Hazte una infusión de ajo. Sí, es asqueroso y tu aliento sufrirá las consecuencias, pero el ajo reforzará tu sistema inmunológico. Un par de mejunjes de ajo te aliviarán la tos, te despejará los bronquios y notarás que puedes respirar mucho mejor.
- Date un baño calentito. No hay nada que nos guste más cuando estamos acatarrados que meternos en la ducha y sentir el agua caliente. Úsalo como excusa y encierrate en el baño un rato para aliviar los dolores musculares.
- Usa agua de mar. Si tienes la suerte de vivir cerca de la playa, coge un poco de agua, échate unas gotas en la nariz y suénate. Si por el contrario vives en una zona sin playa, basta con mezclar agua y sal y seguir el mismo procedimiento.
- Cocina un caldo. Calentito, claro. Es el mejor remedio de todos, porque además de estar rico, te hará sentir menos congestionado y a tu garganta le vendrá de maravilla.
- Bebe leche con miel. Es lo más nos recomiendan cuando nos duele la garganta. La miel cuenta con un efecto calmante y antiinflamatorio y, por su parte, la leche es una bebida rica en vitaminas y minerales, por lo que esta combinación te hará sentir mucho mejor.
- Pon una cebolla cerca de la cama. Si tienes mucha tos, este remedio es infalible. Pártela por la mitad, añádele un poco de azúcar y un poco de agua para que sude más y colócala debajo de la cama o en el cabecero.
Además de todos estos remedios, siempre podemos echar mano de complementos creados especialmente para aliviar los síntomas del resfriado. En Aquilea disponen de una completa gama de productos elaborados a partir de ingredientes naturales para que el invierno sea un poquito mas llevadero. Entre sus productos encontraras Aquilea Mucus que entre sus ingredientes contiene drosera, una planta que contribuye a mantener el nivel óptimo de mucosidades y a la salud de las vías respiratorias. O también Aquilea Garganta indicado para el tratamiento de las afecciones orofaríngeas como el dolor de garganta y la faringitis entre otras. Con el paso de los días, tu catarro irá remitiendo. Hasta entonces, apunta estos remedios para sobrellevarlo de la mejor forma posible.