Los 10 hábitos alimentarios saludables que debes conocer
Tras más de dos meses confinados en casa y después de poder salir a todos los bares y restaurantes que antes estaban cerrados, es muy probable que muchos de nosotros hayamos cogido unos kilos de más. Ahora que estamos en verano, todos queremos lucir nuestro cuerpo de siempre y la eterna pregunta es ¿cómo? Nosotros en este post te contamos cómo cambiar hábitos alimenticios para adelgazar. ¡No te lo pierdas!
Hábitos alimenticios para adelgazar
No hace falta hacer dietas imposibles para adelgazar. De hecho, estas más que una solución acaban convirtiéndose en un problema, ya que tienen efecto rebote y, además, no nos aportan todos los nutrientes que nuestro cuerpo necesita para funcionar correctamente. Lo más práctico es cambiar los hábitos alimentarios e incluir nuevas rutinas en nuestras comidas y en nuestro día a día. ¡Toma nota!
- Lo idóneo es hacer cinco comidas diarias en las que se incluya el desayuno, el almuerzo, la comida, la merienda y la cena. Ten siempre en cuenta el dicho “desayuna como un rey, come como un príncipe y cena como un mendigo”, si se cumple esta regla, los kilos irán desapareciendo. Procura que todas las comidas te aporten nutrientes y evita las calorías vacías.
- Haz un cambio de despensa. Saca todas las tentaciones como el chocolate o las patatas fritas y empieza a llenar los estantes con frutos secos, fruta, hortalizas, pastas y arroces integrales. Procura llevar una alimentación variada, donde se incluya el pescado y la carne, pero sobre todo frutas y verduras.
- Desayuna todos los días. Es un tópico decir que “el desayuno es la comida más importante del día”, pero es verdad. Ingiere fruta, proteínas y cereales en la primera comida del día y notarás cómo estás más saciado/a.
- Duerme bien. Sí, un buen descanso favorece la pérdida de peso. ¿Por qué? Por una sencilla razón. Si tenemos déficit de sueño, nuestro cuerpo y nuestro cerebro necesitan mayor aporte de energía y, por lo tanto, reclamarán alimentos más calóricos. En cambio, si dormimos las 7 u 8 horas recomendadas de forma placentera, nuestro cuerpo y mente estarán descansados y no tendremos la necesidad de un chute de energía calórica.
- Evita cenar demasiado tarde. El metabolismo no se ralentiza por la noche, pero si desde la última comida han pasado 6 horas en vez de 4, a la hora de cenar comeremos lo primero que nos encontremos. Seguramente sean ultraprocesados, igual de ricos que insalubres y te impedirán dormir como debes porque su digestión es más lenta. Recuerda que dormir mal no favorece la pérdida de peso… Es la pescadilla que se muerde la cola.
- Presta atención a las cantidades. Realmente, no es lo que comas sino la cantidad que comas. Nuestro cuerpo no necesita demasiada cantidad de comida para cubrir sus necesidades; por eso, debes escuchar al tuyo y no comer más de lo necesario. Antes de llevarte algo a la boca, pregúntate si realmente tienes hambre. Si la respuesta es no, entonces déjalo. Además, es importante comer despacio y disfrutando de la comida, ya que la sensación de saciedad tarda alrededor de 20 minutos en aparecer.
- Planifica los menús. La organización es clave en todos los aspectos de la vida, pero en cuestiones de alimentación, aún más. Llevar un planning de las comidas nos ayudará a cocinar sin prisas y sin tener que recurrir a la improvisación. Si durante la semana no tienes tiempo, procura cocinar el fin de semana y guardar la comida en tuppers para no caer en la comida rápida.
- Evita los refrescos y el alcohol. Sí, las copas de vino y la cerveza también. Por mucho que los refrescos sean Zero o Light, son muy malos para la salud y no favorecen para nada la pérdida de peso. Asimismo, el alcohol aporta calorías vacías que ninguna falta le hacen a nuestro cuerpo. Sustituye estas bebidas por zumos naturales de fruta y verdura o simplemente por agua. Además, beber dos litros de agua diarios es importante para mantener una buena hidratación y, por ende, una buena salud física.
- Se acabó picar entre horas patatas, aceitunas o pintxos. Entre horas, fruta. Este alimento tiene muchos nutrientes y una gran cantidad de fibra que nos ayudará a estar saciados hasta la próxima comida. Además, se recomienda tomar 5 raciones de fruta y verdura al día.
- Muévete. La actividad física es muy importante. No hace falta correr una maratón diaria, con caminar una hora al día a un buen ritmo estaremos quemando más de 200 kcal. Si tu excusa es que no tienes tiempo, prueba a ir andando al trabajo, usa escaleras en vez de ascensor o da pequeños paseos a lo largo de la jornada.
Lo importante a la hora de adelgazar no es estar un período de tiempo a base de frutas y verduras, sino mantener estos hábitos cada día a lo largo de toda la vida. Perder 5 kilos en dos meses no sirve de nada si al tercero ganamos 6 más. La constancia y la interiorización de estos hábitos como estilo de vida harán que tu cuerpo se mantenga.
Además de todas las recomendaciones, la ingesta de infusiones o zumos detox también ayuda a liberar tu cuerpo de toda la grasa saturada que le has dado durante estos meses. De forma general, nuestro propio cuerpo elimina las toxinas, pero en ocasiones llegan más de las que es capaz de eliminar. Una acumulación de estas, puede ser muy molesto en el día a día, ya que puede provocar estreñimiento, cansancio, fatiga o insomnio.
Ya han pasado los meses de confinamiento y hemos podido disfrutar de la buena vida en la terraza de los bares y restaurantes, ahora toca detoxificar el organismo con Aquilea Detox + Quemagrasas. Se trata de un complemento alimenticio que ofrece un plan de 10 días para ayudarte a eliminar las toxinas del cuerpo por su composición a base de Alcachofa y Abedul.
Además, Aquilea Detox + Quemagrasas también contiene Boldo que favorece el confort digestivo, Cola de Caballo que incrementa la eliminación de agua y Té verde que contribuye a un efecto quemagrasas. Asimismo, también es muy beneficioso para la piel, ya que ayuda a eliminar las toxinas de este tejido gracias al Pensamiento Silvestre.