Trucos para reducir el consumo de azúcar
La OMS (Organización Mundial de la Salud) no deja de insistir en los riesgos de un consumo excesivo de azúcar. Y aunque establece que lo ideal sería no sobrepasar los 25 gramos diarios, resulta que en España casi multiplicamos por 4 esta cifra.
Por eso a todos nos conviene revisar lo que comemos y reducir notablemente el contenido de azúcar. Hoy te descubriremos algunos trucos para reducir el consumo de azúcar de forma fácil.
El azúcar, más peligroso de lo que creíamos
Desde siempre, todo el mundo sabe que los dulces engordan. Y que el sobrepeso y la obesidad pueden acabar en una diabetes. Pero más recientemente se está demostrando que un exceso de azúcares en la alimentación también aumenta la tensión arterial y los niveles de triglicéridos, lo que se traduce en un mayor riesgo de tener problemas de corazón.
Ojo a los azúcares añadidos
El azúcar que lleva la fruta natural no debe preocuparte. El que nos debe preocupar un poco más es el que ingerimos disimulado en múltiples productos y el que utilizamos en la cocina. Controlarlo es bastante sencillo ya que muchas veces puede sustituirse por algún edulcorante natural como la stevia o elegir en los productos de riesgo la versión “sin azúcar añadido”.
La prioridad es conocer cuáles son los productos que llevan azúcares añadidos y evitar un consumo diario o excesivo:
- Bebidas gaseosas (una sola lata de ciertos refrescos lleva nada menos que ¡40 gramos de azúcar añadido!, cuando lo saludable es no tomar más de 25 gramos al día…)
- Zumos de fruta (no todos, en la etiqueta verás si llevan azúcares añadidos o no)
- Golosinas, caramelos, chuches, etc. (principales culpables de las caries en los niños)
- Productos de pastelería y bollería
- Salsas como el ketchup
- Conservas en almíbar, bebidas de cacao soluble, etc.
Trucos que ayudan a consumir menos azúcar
El mejor “truco” no es ningún truco: se trata, sencillamente, de tomar conciencia de que tal vez tú y tu familia estéis tomando demasiado. A partir de aquí, sin prisa pero sin pausa:
- Procura reducir los alimentos y bebidas con azúcar añadido (repasa la lista anterior)
- Si utilizas azúcar en la cocina, prueba a reducirlo poco a poco, sustituirlo por stevia u otros edulcorantes naturales.
Y puede que te ayude:
- Engañar al cerebro. Cuando sientas el deseo de algo dulce, un buen recurso es el chocolate con más del 70% de cacao, o un caramelo sin azúcar, o un refresco light.
- Ir sin hambre a la compra. Si vas con hambre, llenarás el carrito de bollos y golosinas que una vez en casa se convertirán en tentaciones irresistibles.
- Preparar los postres en casa. Sólo así podrás controlar los ingredientes y ajustar sus cantidades
- Moverte. La actividad y el ejercicio siempre vienen bien, porque hacen funcionar el metabolismo y ayudan así a equilibrar el organismo. ¡Y encima te distraen! (en el sofá es donde suele empezar la ansiedad por un par de bombones, pastelitos o helados…)
Ya ves que el abuso del azúcar puede ser tan peligroso como el abuso de la sal. Y como nadie sabe exactamente dónde termina el uso y empieza el abuso, tenemos los científicos que nos señalan las fronteras. Hacerles caso siempre resulta muy saludable.